domingo, 27 de mayo de 2012

Public money, money ...

El jueves se publicaron en el BOA las ayudas que el Gobierno de Aragón va a destinar el curso próximo para el comedor escolar. Una partida de 3 millones de euros. Este viernes, cuando se ha hecho público que el Gobierno de España va a destinar 23.000 millones de la misma moneda a reflotar Bankia, me ha dado por comparar ambas cifras. Supongamos, que es mucho suponer, que Aragón es la comunidad más tacaña en este tipo de ayudas que,  los que conocemos el tema de cerca, sabemos que en muchas ocasiones son verdaderos subsidios de  subsistencia para la infancia más desfavorecida. Supongamos también que  la media del resto de las CCAA pudiera llegar a multiplicar por cinco la aragonesa; ambas suposiciones nos darían la "escalofriante cantidad" de 255 millones de euros. He sido muy optimista y el resultado es que las ayudas para el comedor de los escolares de las familias  pobres (porque no se puede llamar de otra manera a las que son susceptibles de alcanzar la beca) podrían constituir ...¡¡¡el 1%!!! del dinero que se va a llevar Bankia. 
¿Este es el país que queremos?
Yo, no.

martes, 22 de mayo de 2012

¿Y si fueran otros los que pagaran?

La Mezquita de Córdoba fue construida entre los años 780 y 785 por Abderramán I. Doce siglos después, el 2 de marzo de 2006, la Iglesia Católica inscribió el inmueble a su nombre en el registro de la propiedad número cuatro de Córdoba: tomo 2381, libro 155, folio 198. El trámite costó apenas 30 euros.

Tal robo fue posible por dos milagros.
 
El primero, que José María Aznar cambió la ley hipotecaria en 1998 para permitir a la Iglesia apropiarse de edificios de dominio público, aunque sean patrimonio de todos los españoles: basta con que el señor obispo dé fe y certifique que pertenecen a la Iglesia, sin necesidad de notario.
 
El segundo milagro, que disponer de un edificio de 23.400 metros en pleno centro de Córdoba le sale gratis a la Iglesia: no paga el IBI y tampoco se ocupa de los gastos de conservación.
 
 
La entrada en la Mezquita de Córdoba cuesta 8 euros por persona; al año recibe más de un millón de visitantes. No te entregan factura y es dudoso que el dinero recaudado pague impuestos: se considera un donativo y, como tal, está exento de tributación.
 
El obispado de Córdoba dispone de la Mezquita a su absoluta voluntad. También decide quién puede trabajar en ella como guía y quién no. No es raro que haya días en los que se cierre el acceso a los turistas porque hay, por ejemplo, una convención de sacerdotes en su interior.
 
Sin embargo, los gastos de restauración y conservación no los paga la Iglesia: los PAGA el Estado.
es decir, los gastos los pagamos nosotros.
 
Desde 1998, la Iglesia ha inscrito a su nombre cientos de edificios, muchos de ellos financiados por los vecinos de cada pueblo o ciudad.
 
Zapatero no cambió la ley en ocho años.
Rubalcaba prometió reformarla en su programa electoral.

 


Gracias a esta información remitida por alguien que bebe aguas del río Ara, lo que sin duda contribuye a su vista clara.